La preboda en Nerja de Fátima y Antonio fue una pasada. Una pareja muy enrollada que se prestan a todas mis locuras. Fátima tenía muchas ganas de hacer esta sesión puesto que en ella participaría su pequeña de seis añitos Merche, una niña que es un amor de persona y por la que Antonio tiene devoción. La verdad que más divertida no podría haber salido. Una tarde con muchas risas y mucho amor.
